Cuentos locos: enero 2008

viernes, 25 de enero de 2008

Las Brujas de Eastwick - John Updike (1984)

Reseña del libro, publicado por primera vez en 1984, tres años antes de que se estrenase el filme con el mismo nombre.

Las brujas de Eastwick nos relata la aburrida vida que llevan tres divorciadas en una pequeña localidad de la puritana Nueva Inglaterra, donde se reúnen para tomar unas copas e imaginar al hombre ideal. Su deseo de conocerle y enamorarse es tan grande que, un día, al aparecer Daryl van Horne, un forastero rico, enigmático y fascinante, se preguntan si su llegada ha sido una simple coincidencia o, por el contrario, poseen algún poder extraordinario mediante el cual han podido conjurarlo.

Las Brujas de Eastwick, sábado 26 de Enero a las 18:00 horas.

viernes, 18 de enero de 2008

Historia de "La Joven de la Perla" (el libro)


LA HISTORIAGriet se llamaba, era una criada más de las innumerables que empleó nuestra familia hasta poco antes de la muerte del buen maestro Vermeer. Nunca supe yo su apellido, y no creo que nadie en la familia lo haya sabido nunca. Sí sé que provenía de una localidad lejana, y que sus padres y ella misma eran protestantes, Dios los perdone, porque solía huir espantada cada vez que encontraba a la familia en oración. Tanneke, una de nuestras criadas más antiguas, conocía bien a su madre, con quien había servido un tiempo en otra casa, y por eso, cuando mi madre había necesitado más ayuda, ella la había recomendado a la familia.Griet era también muy joven, muy inocente. No daba la impresión de ser una persona muy brillante. Apenas hablaba, al revés de la mayoría de sirvientas, que como es sabido suelen devorar por los rincones los chismes de sus patrones. Y era bella, pero sólo si uno se fijaba en ella lo suficiente para notarlo, lo cual no era muy frecuente, con las idas y venidas que siempre animaban nuestra casa y la pequeña multitud en que nuestra familia se había convertido, además de su actitud huidiza. Siete hermanos éramos entonces, y aún habríamos de ser más andando los años, y las criadas eran otras cinco personas, a lo cual habría que sumar a nuestra muy amada abuela Maria.Recuerdo que Griet atesoraba una pequeña placa de porcelana pintada, donde, según decían las demás criadas, su padre había pintado una escena horageña en trazos toscos y simples.No sé exactamente cuándo mi padre habrá visto a Griet por primera vez. Sé que no fue en sus primeros días con nosotros, porque él había partido a reunirse con otros maestros de la Cofradía de San Lucas [Nota del Traductor: La Cofradía de San Lucas era el gremio de artesanos y artistas holandeses]. Además,"ver" es un verbo engañoso. Es muy probable que él la haya mirado sin verla más de una vez, tan ensimismado andaba siempre el buen maestro. Muchas veces mi misma madre, Catharina, tenía que insistir para poder entablar una verdadera conversación con su esposo. Como ya he dicho más arriba, ambos se casaron muy enamorados, y no puede haber duda de que fueron los mejores compañeros. Mi padre renunció a sus errores religiosos [N. del T.: Vermeer era originalmente protestante, como la mayoría de holandeses de su tiempo, pero se convirtió al catolicismo para casarse con Catharina], y halló en la madre de su esposa, Maria Thins, una formidable aliada y promotora de su arte, sin cuyo apoyo probablemente no hubiera alcanzado, en vida, la preeminencia de que gozó.

Biografía de Gustavo Adolfo "Bécquer"


Gustavo Adolfo Bécquer
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Gustavo Adolfo Bécquer
Gustavo Adolfo Bécquer
Nació en:
Sevilla, España el 17 de febrero de 1836
Murió en:
Madrid, España el 22 de diciembre de 1870
Ocupación:
poeta
Nacionalidad:
Español
Periodo:
S.XIX
Género:
Poesía y Narrador.
Movimientos:
Romanticismo
Gustavo Adolfo Domínguez Bastida, más conocido como Gustavo Adolfo Bécquer (adoptó dicho sobrenombre siguiendo los pasos de su hermano, el pintor Valeriano Bécquer), (Sevilla, 17 de febrero de 1836 - Madrid, 22 de diciembre de 1870), fue un poeta y narrador español, perteneciente al movimiento del Romanticismo.
Tabla de contenidos[ocultar]
1 Biografía
2 Análisis de su obra
3 Bécquer como dibujante
4 Obra
4.1 Leyendas
4.2 Otras narraciones
4.3 Teatro
4.4 Artículos
4.5 Otras obras
5 Véase también
6 Bibliografía
7 Enlaces externos
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[editar] Biografía
Nació en Sevilla, hijo del pintor José Domínguez Insausti, que firmaba sus cuadros con el apellido de sus antepasados como José Domínguez Bécquer, por parte de su abuela. Su madre fue Joaquina Bastida de Vargas. Por el lado paterno descendía de una noble familia de comerciantes de origen flamenco, los Becker o Bécquer, establecida en la capital andaluza en el siglo XVI; de su prestigio da testimonio el hecho de que poseyeran capilla y sepultura en la catedral misma desde 1622.
Su casa natal ya no existe. Fue bautizado en la parroquia de San Lorenzo Mártir. Sus antepasados directos, empezando por su mismo padre, José Domínguez Bécquer, fueron pintores de costumbres andaluzas, y tanto Gustavo Adolfo como su hermano Valeriano estuvieron muy dotados para el dibujo. Valeriano, de hecho, se inclinó por la pintura. Sin embargo el padre murió el 26 de enero de 1841, cuando contaba el poeta cinco años y esa vocación pictórica perdió el principal de sus apoyos. En 1846, con diez años, Gustavo Adolfo ingresa en el Colegio de Náutica de San Telmo, en Sevilla, donde le da clases un discípulo del gran poeta Alberto Lista, Francisco Rodríguez Zapata, y conoce a su gran amigo y compañero de desvelos literarios Narciso Campillo. Pero los hermanos Bécquer quedaron huérfanos también de madre al año siguiente, el 27 de febrero de 1847, y fueron adoptados entonces por su tía María Bastida y Juan de Vargas, que se hizo cargo de sus sobrinos, pero Valeriano y Gustavo se adoptaron desde entonces cada uno al otro y emprendieron de hecho muchos trabajos y viajes juntos.
Se suprimió el Colegio de Náutica y Gustavo Adolfo quedó desorientado. Pasó a vivir entonces con su madrina Manuela Monahay, acomodada y de cierta sensibilidad literaria. En su biblioteca el poeta empezó a aficionarse a la lectura. Inició entonces estudios de pintura en los talleres de los pintores Antonio Cabral Bejarano y Joaquín Domínguez Bécquer, tío de Gustavo, que pronosticó "Tú no serás nunca un buen pintor, sino mal literato", aunque le estimuló a que estudiara y le pagó los estudios de latín. Tras ciertos escarceos literarios (escribe en El trono y la Nobleza de Madrid y en las revistas sevillanas La Aurora y de El Porvenir) marchó a Madrid con el deseo de triunfar en la literatura en 1854. Sufrió una gran decepción y sobrevivió en la bohemia de esos años. Para ganar algún dinero el poeta escribe, en colaboración con sus amigos (Julio Nombela y Luis García Luna), comedias y zarzuelas como La novia y el pantalón (1856), bajo el pseudonimo de Gustavo García en que satiriza el ambiente burgués y antiartístico que le rodea, o La venta encantada, basada en Don Quijote. En ese año fue con su hermano a Toledo, un lugar de amor y de peregrinación para él, a fin de inspirarse para su futuro libro Historia de los templos de España. Le interesan por entonces el Byron de las Hebrew Melodies o el Heine del Intermezzo a través de la traducción que Eulogio Florentino Sanz realiza en 1857 en la revista El Museo Universal. Fue precisamente en ese año, 1857, cuando apareció la cruel tuberculosis que le habría de enviar a la tumba. Tuvo un modesto empleo dentro de la Dirección de Bienes Nacionales y perdió el puesto, según cierta leyenda, por sorprenderlo su jefe dibujando. Su pesimismo va creciendo día a día y sólo los cuidados de su patrona en Madrid, de algunos amigos y de Valeriano le ayudaron a superar la crisis. Ese año empieza un ambicioso proyecto inspirado por El genio del Cristianismo de Chateaubriand: estudiar el arte cristiano español uniendo el pensamiento religioso, la arquitectura y la historia: "La tradición religiosa es el eje de diamante sobre el que gira nuestro pasado. Estudiar el templo, manifestación visible de la primera, para hacer en un sólo libro la síntesis del segundo: he aquí nuestro propósito". Pero sólo saldrá el primer tomo de su Historia de los templos de España, con ilustraciones de Valeriano.
Hacia 1858 conoció a Josefina Espín, una bella señorita de ojos azules, y empezó a cortejarla; pronto, sin embargo,se fijó en la que sería su musa irremediable, la hermana de Josefina y hermosa cantante de ópera Julia Espín, en la tertulia que se desarrollaba en casa de su padre, el músico Joaquín Espín, maestro director de la Universidad Central, profesor de solfeo en el Conservatorio y organista de la capilla real, protegido de Narváez. Gustavo se enamoró (decía que el amor era su única felicidad) y empezó a escribir las primeras Rimas, como Tu pupila es azul, pero la relación no llegó a consolidarse porque ella tenía más altas miras y le disgustaba la vida bohemia del escritor, que aún no era famoso; Julia dio nombre a una de las hijas de Valeriano. Durante esta época empezó a escuchar a su admirado Chopin.
En 1860 publica Cartas literarias a una mujer en donde explica la esencia de sus Rimas que aluden a lo inefable. En la casa del médico que le trata de una enfermedad venérea, Francisco Esteban, conocerá a la que será su esposa, Casta Esteban Navarro. Contrajeron matrimonio en el 19 de mayo de 1861. De 1858 a 1863, la Unión Liberal de O'Donnell gobernaba España y en 1860, González Bravo, con el apoyo del financiero Salamanca, funda El Contemporáneo, dirigido por José Luis Albareda, en el que participan redactores de la talla de Juan Valera. El gran amigo de Bécquer, Rodríguez Correa, ya redactor del nuevo diario, consiguió un puesto de redactor para el poeta sevillano. En este periódico, y hasta que desaparezca en 1865, hará crónica de salones, política y literatura; gracias a esta remuneración viven los recién casados. En 1862 nació su primer hijo, Gregorio Gustavo Adolfo, en Noviercas, (Soria), donde posee bienes la familia de Casta y donde Bécquer tuvo una casita para su descanso y recreo. Empieza a escribir más para alimentar a su pequeña familia y, fruto de este intenso trabajo, nacieron varias de sus Leyendas.
Pero en 1863 padeció una grave recaída en su enfermedad, de la que se repuso, sin embargo, para marchar a Sevilla con su familia. De esa época es el retrato hecho por su hermano que se conserva en el Museo de Bellas Artes de Sevilla. Trabaja con su hermano Valeriano y Casta Esteban discute con él, porque no soporta su carácter y el hecho de que casi siempre ande por casa de su hermano. González Bravo, amigo y mecenas de Gustavo, le nombra censor de novelas en